Hoy traemos otro testimonio del Encuentro de Burgos y las fotos, porque hay experiencias que nos nace contarlas:
“Bajarse del pedestal y conocer a las personas”. Eso es lo que hemos aprendido los grupos ACI en Burgos este fin de semana.
Cuando bajamos al patio de la casa a jugar con los niños, cuando escuchamos el testimonio de extranjeros que, tras un largo viaje llegaron a España huyendo de los peligros de sus países, cuando escuchamos a Esther (Esclava del Sagrado Corazón de Jesús y coordinadora de la asociación Atalaya; que ayuda a la inserción de los inmigrantes en España); nos dimos cuenta de que en el mundo no hay fronteras, sólo personas. Nos dimos cuenta de que no existe el tiempo si no es compartido. Nos dimos cuenta de que no existen los países ni el color de piel, sino únicamente niños agradecidos con ganas de jugar y de abrazarte. Nos dimos en cuenta, en definitiva, de que ni la edad, ni el sexo, ni la religión, ni la cultura tienen porque alterar una relación de amistad o de confianza.
Y los más bonito del mundo es darse cuenta de que estás en frente de Samira, Suhaila, Cauta, Mohamed, Yuli…; en frente de personas que son exactamente iguales que tú; quizás un poco más altas o más bajas, quizás un poco más rubias o más morenas, pero sobre todo mucho más fuertes, sonrientes y agradecidas.
Gracias de nuevo a todos ellos y a los grupos ACI por dejarnos llevar por el corazón. Nos volveremos a ver Atalaya. Te lo prometo.>
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Precioso testimonio
Muchas gracias Leticia, es una experiencia vivir esto.